* Juanita Casas Carvajal
Numerosas investigaciones científicas realizadas en los últimos 20 años señalan que los primeros cinco años de vida son el período más importante para el desarrollo humano.
Aunque aprendemos durante toda la vida, durante la primera infancia tanto la velocidad como la cantidad de aprendizajes son sustancialmente mayores; por ello, son años definitivos para el desarrollo de competencias emocionales, motrices, cognitivas y sociales.
Es necesario por tanto elegir una metodología de enseñanza que garantice que se aproveche al máximo este enorme potencial de aprendizaje.
Teniendo claro que los años en que tiene lugar la educación preescolar son de la mayor importancia, es pertinente hablar de metodologías; brevemente aquí explicaremos por qué en nuestra opinión, el aprendizaje a través del juego resulta ideal.
Mucha gente tiende a pensar en el juego como una actividad de descanso una vez ha finalizado el aprendizaje formal; en realidad el juego ES la herramienta didáctica más poderosa, razón por la cual hace parte esencial del proceso de aprender.
El juego es el verdadero trabajo de los niños; los invita a imaginar, les ayuda a generar pensamiento creativo, los pone en contacto con una amplia gama de conceptos, les ayuda a entender el mundo, facilita la expresión oral, promueve el desarrollo de habilidades socials y favorece su bienestar emocional.
Por esta razón, generar oportunidades de juego, exploración y aprendizaje vivencial es fundamental para que un programa de educación preescolar sea efectivo.
Comments